De todos los países de habla hispana, España tiene las mejores actrices del entretenimiento adulto. Grandes, pequeñas, voluptuosas, operadas, blancas, morenas, tetonas, culonas, MILF y Teens. Hay de toda clase para todos los gustos.
No es para menos. Algunas de las productoras españolas fueron precursoras del porno tal como lo conocemos en la actualidad. Putalocura, Fakings o BrunoyMaria, abrieron las puertas a que candidatas entraran en el fantástico mundo del porno español.
Mencionar quiénes son las mejores actrices españolas sexuales es un reto duro. Hay tantas, y cada vez aparecen más, que hablar de un número reducido es un desperdicio para la cantidad de actrices con potencial de llevarte a lo más alto, eróticamente hablando.
Sin embargo, haremos el intento y mencionaremos actrices españolas que están haciendo ruido tanto a nivel nacional, como internacional. ¡Acompáñanos!
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Mejores actrices porno españolas
Nekane
También conocida como Nekane Sweet, es una joven procedente de Granada, España, que actualmente tiene 30 años de edad. Es una blanca de tetas grandes naturales que está en activo desde el año 2011.
Sus primeros pasos fueron en la productora de Torbe y luego ganó popularidad nacional en Cumlouder. Tiene un talento único frente a las cámaras y sabe cómo seducirnos con su mirada, dos enormes melones y trasero redondo como un durazno.
Ha aparecido en muchas de las productoras más importantes del mundo del entretenimiento adulto, como Evil Angel, Legal Porno, Reality Kings, Babes y Brazzers.
Lana Bunny
Lana es de las caras nuevas del porno. Tiene 26 años y es procedente de Valencia. Inició en 2019, y con solo 3 años de experiencia, ya se adueñó de las pajas de los españoles.
Su cuerpo y mirada angelical no le hacen justicia a lo pícara que es frente las cámaras. Nació para la pornografía y sus escenas de alto voltaje lo certifican.
Una de las virtudes de Lana es que hace de todo. No se cohíbe. Pero, según ella misma, su mejor campo es el anal y los grupales. Tiene muchas de esas escenas que nos hacen vibrar.
Apolonia LaPiedra
Si hablamos de actrices porno españolas que la están rompiendo a nivel internacional, hay que incluir a Apolonia La Piedra, una actriz para adulto que hace un porno del bueno: salvaje, erótico y emocionante.
Inició en el porno desde muy joven. Impresionó a los productores y fanáticos con su esbelta figura. Alta, atlética y sensual, es todo lo que una actriz para adultos tiene que ser.
Desde que hizo su primera escena no ha parado de currar. Colaboró con las principales líneas nacionales del porno y se codeó con los grandes del cine adulto español, como Nacho Vidal o Jordi el Niño Polla.
Hay pocas cosas que no estén en el resumen de vida sexual de Apolonia: encuentros heterosexuales, colaboraciones con figuras femeninas del calibre de Keira Lee, tríos, orgías, con blancos, con negros, anal, vaginal, oral. Todo, absolutamente todo. Una reina del porno.
Ginebra Belluci
Ginebra es de esas actrices que irrumpen en el prono de manera avasallante. Tiene 22 años, pero ya es de las caras conocidas del porno en español.
Fue descubierta por un genio de la pornografía, que también presentó ante las cámaras a Apolonia, Ramiro LaPedria. Su talento y descaro le abrieron paso a trabajar con grandes productoras, como BangBros, Cumlouder, Mofos, Pierre Woodman y más.
También ha trabajado con Jordi El Niño Polla y está apuntando a una escala internacional, donde seguramente le irá bien, porque lo hace en la cama como una diosa. Se desenvuelve como ninguna antes las cámaras y prueba de todo. No se limita.
Montse Swinger
Con 44 años, Montse es para muchos la mejor MILF del porno español. Tetas naturales, cuerpo bien cuidado, y mirada seductora, es el anhelo de los hombres jóvenes y ella ansiosa de comérselos. De hecho, son sus favoritos: los yogurines.
A diferencia del resto de la mayoría de las estrellas del porno, que entran a la industria desde jóvenes, Montse esperó hasta los 34 años para darse a conocer frente a las cámaras.
Eso no quiere decir que haya descubierto su vocación tarde. Todo lo contrario. Ya se desenvolvía en ambientes swingers desde pichona y cuando ganó popularidad en el circuito del sexo libre, las productoras de líneas nacionales le abrieron las puertas.
El sello de Montse es el porno amateur. Si bien triunfaría en la industria internacional, prefiere disfrutar de las escenas ‘caseras’, que son las que más morbo le producen.